El cáncer de ovario es una enfermedad que afecta al aparato reproductor femenino y es uno de los tipos de cáncer más comunes entre las mujeres. Según el Fundo Internacional de Investigación sobre el Cáncer de Ovario, más de 300 mil nuevos casos de este tipo de cáncer fueron diagnosticados en 2020.

Dado que es una enfermedad difícil de diagnosticar, la persona necesita estar atenta a sus principales señales y síntomas, así como mantener una rutina de seguimiento médico.

La genética puede ser uno de los factores de riesgo para el cáncer de ovario. Obtén más información sobre esta enfermedad y sus principales síntomas aquí en nuestro blog.

¿Qué es el cáncer de ovario?

Los ovarios son dos glándulas ubicadas en la región pélvica de personas de sexo biológico femenino, una a cada lado del cuerpo. Son responsables de la producción de los óvulos, células encargadas de la reproducción humana, y de hormonas como el estrógeno y la progesterona.

El cáncer de ovario, al igual que otros tipos de cáncer, se caracteriza por el crecimiento descontrolado de las células (en este caso, de las ubicadas en el ovario).

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Factores de riesgo

Los factores genéticos tienen una influencia importante en el desarrollo del cáncer de ovario. Hay mutaciones en genes específicos que indican si la persona tiene predisposición o no para desarrollar la enfermedad, así como el nivel de esa propensión.

Las alteraciones genéticas en los genes BRCA1 y BRCA2 son responsables de la mayoría de los casos hereditarios tanto de cáncer de ovario como de cáncer de mama.

Sin embargo, la genética no es el único factor de riesgo para el desarrollo del cáncer de ovario. Entre los principales factores ambientales se encuentran la edad avanzada, el historial familiar de la enfermedad y el consumo de grasa en la dieta. Las mujeres que nunca han tenido hijos también están en el grupo de riesgo.

Principales signos y síntomas

Cuando decimos que el cáncer de ovario es difícil de diagnosticar, tiene que ver con la falta de síntomas en sus etapas más tempranas.

Los signos y síntomas de la enfermedad suelen aparecer a medida que el tumor crece en los ovarios. Entre los principales se encuentran la presión, dolor o hinchazón abdominal (también puede sentirse dolor en la espalda y las piernas), fatiga constante, pérdida de apetito, náuseas, estreñimiento y necesidad frecuente de orinar.

Dado que no existe un examen específico para la detección del cáncer de ovario (como en el caso del Papanicolau, que detecta el cáncer de cuello uterino), se recomienda estar atento a los factores de riesgo, mantener un peso saludable y buscar atención médica.

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